Ansiedad por comer
- Xochitl Ponce
- 23 jun 2021
- 3 Min. de lectura
En la actualidad, las consultas por comer de manera excesiva debido a ansiedad son de las más frecuentes en Nutrición. Los pacientes refieren que no pudieron seguir el plan de alimentación porque sienten mucha ansiedad y comieron de más para calmarse.
Y... ¿Por qué sucede esto? ¿Por qué calmamos nuestra ansiedad con la comida?
La ansiedad se refiere a ese estado emocional caracterizado por sentimientos de temor, tensión, amenaza o peligro. Debemos hacer una pausa, y escuchar lo que la ansiedad nos quiere decir. Los efectos de vivir con ansiedad por mucho tiempo pueden derivar en malos hábitos alimenticios, de lo que la mayoría de las veces no somos conscientes y provoca lo que llamamos ansiedad por comer, comer por ansiedad o hambre emocional, una alteración que se ve con mayor frecuencia. Si no contamos con las herramientas adecuadas para gestionar dicha emoción, resulta en que estemos picando de manera constante.
Abrimos el refri y... que un poquito de pan y que una galleta o que unos chocolates..." y, de poquito en poquito se va convirtiendo en un montón de calorías que no nos dejan avanzar en conseguir aquello que nos hemos propuesto.
El problema no son los alimentos, sino que no hemos sabido a escuchar lo que la ansiedad quiere decirnos.

Los factores que provocan esta sensación pueden ser varios:
1. Mala relación consigo mismo.
¿Has prestado atención en la forma en que te hablas? ¿Cómo eres de exigente contigo misma? ¿Cómo te demuestras afecto?
Si la mayoría de las veces que te escuchas, oyes una voz crítica con creencias negativas sobre ti misma, si sientes que no eres suficiente, si no te dedicas tiempo de calidad y estás desconectada de las señales de tu cuerpo, lo más probable es que la ansiedad te visite y la comida va a tener la función de distraerte de la insatisfacción que sientes por ti misma.
2. Altos niveles de estrés
El estrés funciona en nuestro cuerpo al prepararnos ante una situación compleja; aumenta la concentración, motivación y energía, por lo que el estrés en sí es positivo.
Sin embargo, cuando el estrés nos acompaña diario, nuestro organismo libera grandes cantidades de cortisol lo que genera efectos adversos. Nuestro organismo interpreta el exceso de cortisol como peligro y activa la ansiedad. En la comida entramos un refugio en el que sentimos paz, ya que se activan otras cadenas hormonales que nos hacen sentir placer.
3. Insatisfacción con la vida
La ansiedad por comer es una señal de nuestro cuerpo-mente indicándonos que algo no va bien. Puede ser respuesta a insatisfacción con la vida, no sentirse realizado y la comida llena esas hambres emocionales que no hemos llenado.
Es frecuente escuchar que debemos de controlar nuestras ansias para comer y ¿qué crees?, suena tan simple y fácil... Lo que necesitamos es escuchar nuestras señales interna y nutrirla de maneras distintas a la comida.
Las personas que comen por ansiedad o sienten hambre emocional, están cansadas de hacer dietas una y otra vez, pensando que no logran sus objetivos porque no saben controlarse y no tienen fuerza de voluntad.
Entonces...Cuando queremos tratar el "hambre emocional" ¿la dieta es la solución? Se puede decir que la dieta no es lo único que debemos tener en cuenta. Y es mas, restringir alimentos y prohibir alimentos es contraproducente ya que causa descontrol, comemos de manera desproporcionada y se entra en un ciclo peligros en el que la culpa es el protagonista.
En mi consulta, con herramientas como los diario de alimentos ó meditación entre otros, enseño a mis pacientes a identificar si el hambre que sienten es ansiedad o realmente tienen hambre y a clamar esa ansiedad por comer, además hacemos siempre un balance de alimentos para incluir aquellos los alimentos que podrían etiquetarse como "prohibidos".
Me dará mucho gusto verte en consulta y trabajar juntos en lograr un peso saludable.
Xochitl Ponce
Nutrióloga clínica,
Coach en Nutrición y Salud
Educadora en Diabetes

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